Querida (y odiada) EM:

ojalá no tuviera que escribir esta carta,ojalá no tuviéramos que padecerte, pero gracias,gracias por hacer de nosotros unos luchadores nos acompañas desde hace 24 años y fue muy duro conocerte,apareciste sin más y no nos caías nada bien.
Pero me enseñaste que si ella podía podíamos todos hiciste de ella la guerrera más fuerte de toda la historia,con un bebé y una pequeña de 6 años que lloraba y no entendía porque apareciste,que incluso se sentía culpable por que tú la acompañabas y no te ibas.
Pero gracias a ti aprendimos todo lo que se puede aprender para que te quedaras con nosotros y ayudaste a que todo fuera mejor. Poco a poco llegamos a entenderte y sobrellarte y ya formas parte de nosotros,eres casi invisible por que no se te ve llegar,pero sabemos que estás ahí,y que no desapareces en ningún momento y ella la más guerrera de todas sigue cumpliendo años,sobrellevandolo con su amiga la muleta,y sobre todo con nuestro amor aún nos queda mucho por andar a tu lado pero te doy las gracias porque tú nos has hecho invencibles.Al igual que tú siempre estamos y estaremos a su lado.
Ojalá y pronto llegue esa persona que te haga invisible para siempre. Mientras tanto gracias por darnos las mejores armas para luchar.

Ana B Sánchez